Cuidar nuestros electrodomésticos es un hábito que debemos adoptar, así evitaremos llamar al técnico y podremos ahorrar dinero en reparaciones; en este sentido, debes aprender algunos cuidados caldera. Sigue leyendo los consejos para cuidar tu caldera que te damos en ReparaHogar.
Los cuidados que debes seguir para alargar la vida de tu caldera
Verás que cuidar tu caldera no es muy difícil, solo debes adoptar nuevos hábitos y hacer pequeñas revisiones cada cierto tiempo. Poniendo en práctica estos consejos para cuidar tu caldera es seguro que tu aparato te durará muchos más años y casi no deberás hacer reparaciones.
Conoce tu caldera
Cuando adquirimos un nuevo electrodoméstico, es común que desechemos el manual de usuario sin siquiera leerlo; esto es un gran error. El fabricante pone a tu disposición diferentes consejos e instrucciones sobre cómo usar la caldera, y siguiéndolos al pie de la letra reduces las posibilidades de una avería.
Pero lo más importante es que conocer tu caldera te permitirá reconocer cuando algo anda mal antes de que empeore y sabrás qué hacer. De este modo podrás llamar a un técnico especializado en calderas cuánto antes, evitando que el daño sea mayor y, por tanto, más costoso.
La mejor manera de mantener nuestros electrodomésticos en perfecto estado es programando un mantenimiento periódico; por lo general, basta con que organices un servicio de mantenimiento a la caldera una vez al año. Durante el mantenimiento se realizarán algunas revisiones para garantizar que todo funciona bien y que la caldera sigue siendo segura.
Además, si hay algún problema con la caldera, el técnico podrá detectarlo cuanto antes e incluso hacer las reparaciones u sustituciones que sean necesarias; y, por supuesto, te evitarás que la misma se averíe inesperadamente.
Límpiala regularmente
Al igual que cualquier electrodoméstico en casa, la caldera recoge polvo que podría afectar su funcionamiento, por lo que recomendamos una limpieza regular. Sin embargo, este es uno de los trabajos que deberás dejar en manos de un experto, porque podría ser peligroso; las calderas calientan el agua a altas temperaturas y no son sencillas de manipular, podrías averiarla.
Por fortuna, la limpieza interna de la caldera es algo que puede realizar el técnico durante el mantenimiento. De cualquier manera, asegúrate de limpiarla en el exterior para evitar que entre más polvo o suciedad.
Purga los radiadores
La norma general es purgar los radiadores siempre que hagan ruido y luego volver a llenar la instalación hasta 1,5 bares. Sin embargo, no hay por qué esperar a que empiecen a fallar para limpiarlos, puedes tomar este hábito para asegurarte de que tus radiadores se mantienen limpios y libres de cualquier sedimento o suciedad que pueda obstruirlos.
Esta es una de las tareas para las que no necesitas ayuda, primero asegúrate de que la caldera esté apagada y fría. Hacerlo es tan sencillo como abrir una válvula en el radiador y dejar salir el aire que pueda estar atrapado.
Revisa la presión
La presión del agua es un factor clave en el rendimiento de la caldera, por lo que debemos comprobarla cada dos meses. Para comprobarla es necesario tener el circuito de la caldera lleno de agua y las llaves de salida y retorno de calefacción abiertas. Si la caldera está en frío, la presión debería estar entre 1 y 1,5 bares; cuando calienta la presión sube y luego vuelve a su estado inicial.
Con el tiempo, es normal que la caldera pierda presión y esto afectará su eficiencia. Si la presión disminuye, puedes recargarla siguiendo las instrucciones del fabricante; sin embargo, también es posible que haya una fuga y sería mejor llamar a un profesional.
Aísla las tuberías
Las tuberías que estallan son un problema frecuente durante el invierno, ya que el agua se expande mientras se congela y esto causa que las tuberías se rompan. Por eso nuestro consejo para evitar una inundación en el hogar es mantener las tuberías aisladas.
Esto no es complicado de colocar, en cualquier tienda de bricolaje encuentras aislamiento de tuberías y así te aseguras de que la caldera no se congele. Si no puedes hacerlo, no dudes en llamar a alguien.
Mantén la caldera despejada
Para el correcto funcionamiento de las calderas, es necesario que se mantengan ventiladas. Es por esto que el espacio alrededor del electrodoméstico debe mantenerse despejado; si está dentro de un armario, por ejemplo, trata de no llenarlo con abrigos y otras cosas. Si no estás seguro de que el área esté bien ventilada, puedes preguntar al técnico.
Presta atención a las señales
Finalmente, lo más importante para evitar costosas reparaciones en nuestra caldera es mantenernos atentos a cualquier problema mínimo. Los ruidos fuertes, las marcas de hollín y cualquier grieta visible son señales de que necesitas llamar a un reparador. Lo más importante es que intentes solucionar cualquier problema antes de que empeore.
Si tu caldera esta averiada confía en ReparaHogar
Por desgracia, incluso si sabes cómo cuidar tu caldera, ningún electrodoméstico es eterno. En algún punto podría presentarse una avería y debes tener a alguien en quien confiar para repararla. Si tu caldera está presentan cualquier problema, no dudes en llamar a ReparaHogar y lo arreglaremos.
